El mandatario ucraniano rechazó la versión de los hechos anunciada por autoridades de las regiones separatistas apoyadas por el Gobierno ruso donde culpabilizaban a las propias tropas de Ucrania por causar el bombardeo a la cárcel donde murieron más de 40 prisioneros.
MADRID, 29 Jul. (EUROPA PRESS).- El Presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, ha acusado a las Fuerzas Armadas rusas del ataque contra una cárcel en la localidad de Yelenovka, a causa del que han fallecido al menos 50 presos ucranianos, y ha aseverado que se trata de un “crimen planeado” por Rusia.
Si bien en un primer momento Moscú ha acusado a Kiev de haber ejecutado el ataque, más tarde desde Ucrania han respondido con la versión contraria, señalado a las fuerzas rusas como responsables de un incidente que han catalogado como crimen de guerra.
En este punto, el presidente ucraniano ha mantenido una reunión con altos cargos del Ejército, Defensa y la Inteligencia ucraniana para discutir “en detalle” lo que considera un “ataque terrorista organizado por monstruos inhumanos rusos”.
“Hay suficiente evidencia de que fue un crimen planeado. Y esta es otra confirmación de que Rusia es un Estado terrorista”, ha subrayado el presidente ucraniano en una publicación en su canal de la red social Telegram.
En esta línea, ha instado a Naciones Unidas y al Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) a que se manifiesten respecto a lo ocurrido. “La ONU y el CICR, que se suponía que debían garantizar la vida y la saluda de nuestros prisioneros de guerra, deberían reaccionar de inmediato”, ha aseverado.
Antes que él, el Ministro de Asuntos Exteriores del país, Dimitro Kuleba, ha dicho en su perfil de Twitter que “Rusia ha cometido otro horrible crimen de guerra al atacar una instalación correccional en la ciudad ocupada de Yelenovka, donde retenía a presos de guerra ucranianos”.
Así, ha hecho un llamamiento a todos los “socios” de Ucrania para que “condenen firmemente” lo que considera una “brutal violación del Derecho Humanitario” y que den el paso de reconocer a Rusia como “un Estado terrorista”.
Desde el lado ruso, el jefe adjunto de la Administración Militar de la República Popular de Donetsk, Eduard Basurin, ha tildado también el suceso como “un crimen de guerra” pero, según él, perpetrado por Ucrania, a quien ha acusado de “matar a sus propios ciudadanos”.
La guerra en Ucrania estalló el 24 de febrero tras la orden de invasión firmada por el presidente ruso, Vladimir Putin, quien días antes había reconocido la independencia de las autoproclamadas repúblicas de Donetsk y Lugansk (este), escenario de un conflicto armado desde 2014.